Cuando pensamos en un alimento que reúna unas cualidades alimenticias beneficiosas para nuestro organismo, a priori no somos conscientes de seleccionar el Jamón Ibérico de Bellota. Valorando a la ligera su fuente de proteínas y alto valor biológico. Valores que nos aporta minerales y vitaminas indispensables para nuestro organismo, con un perfil lipídico equilibrado y con una carne moderada en calorías.
Teniendo en cuenta que es un producto saludable y delicioso, a la altura de paladares exigentes.
Alto contenido en vitamina B1, recomendado para nuestro organismo y esto hace el Jamón ibérico un producto presente en nuestra pirámide alimenticia.
El consumo del jamón ibérico de bellota nos ayudara a superar el estrés y la ansiedad, cada vez más presente en nuestras vidas causa del ritmo del trabajo.
Los alimentos ricos en vitamina B1 o tiamina, presentes en esta carne son muy recomendables en periodos de lactancia o durante periodos de convalecencia, debido a que en esas etapas hay un mayor desgaste de esta vitamina B1 a casual de la baja movilidad.
Uno de los factores a tener en cuenta es que este producto no requiere ser cocinado para su consumo, siendo un aliado de la alimentación saludable al no disponer de grasas adheridas, aportándonos nutrientes esenciales para nuestro organismo de forma rápida y eficaz, como son las proteínas de alto valor biológico y vitaminas y minerales esenciales.
El Jamón es además un alimento de fácil digestión, ya que es pobre en colágeno por su proceso de maduración y la actuación de proteasas (enzimas que fragmentan a las proteínas en aminoácidos), por lo que nuestro aparato digestivo puede asimilar los aminoácidos con mayor facilidad.
En definitiva un producto saludable y con muchas ventajas alimenticias. Pocos alimentos reúnen tantos beneficios para nuestro día a día, y nos aportan tanto a nuestro paladar. Incluir el Jamón ibérico en una dieta sana y equilibrada es una opción muy recomendable para nuestros sentidos.